El plan para recortar el presupuesto del hospital Clínic de Barcelona y
derivar buena parte de la actividad de baja complejidad que realiza al hospital
privado del Sagrat Cor ha provocado el rechazo unánime de los sindicatos. “La
decisión muestra un claro favorecimiento al sector privado frente al público”,
denunció el sindicato de enfermería (SATSE).
El departamento de Salud de la Generalitat ha ordenado al Clínic recortar
17,5 millones de euros de aquí a finales de año. Para ello, el centro deberá
cerrar 74 camas y recortar el equivalente de media paga a la plantilla, de unos
4.500 trabajadores, entre otras medidas. Al mismo tiempo, Salud ha ordenado al
hospital que derive parte de su actividad al Sagrat Cor, controlado por la
multinacional sanitaria IDC Salud (antigua Capio), tal y como avanzó el sábado
EL PAÍS.
El plan se enmarca dentro de una ambiciosa reordenación asistencial puesta en
marcha por Salud (RAT) que la Generalitat no ha explicado en detalle. Salud “ha
cedido la actividad menos compleja para favorecer el negocio privado, ya que es
la que requiere menos inversión”, denunció SATSE. El Clínic derivará solo
invervenciones de baja complejidad.
El sindicato Metges de Catalunya calificó de “surrealista” que la Generalitat
reduzca actividad de un hospital público para asignarla a otro con ánimo de
lucro. “Los profesionales lo acabarán pagando con nuevos recortes y despidos”,
manifestó Francesc Duch, secretario general. El sindicato pidió a Salud que
aporte “información global” sobre la RAT que permita analizar el proyecto, que
afecta a todos los hospitales catalanes. También criticó que estos cambios
elevarán el coste medio de las intervenciones en el Clínic, al incrementar el
porcentaje de intervenciones complejas sobre el total. También CC OO, UGT,
APIHC, CGT y AIPS han criticado el plan de recortes, presentado al comité de
empresa el pasado jueves.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada
Nota: Només un membre d'aquest blog pot publicar entrades.